Manejando el pasado: Explorando el manejo de las serpientes en el movimiento de la Iglesia de Dios

El 22 de mayo de 2025, la Sociedad Histórica de los
Movimientos de la Iglesia de Dios se reunió para su
encuentro anual en la Iglesia de Dios de la Profecía
Peerless en Cleveland, Tennessee. Los asistentes,
representantes de varios movimientos dentro de
la familia de la Iglesia de Dios, se reunieron para
confraternizar, aprender y reflexionar sobre la rica y a
veces controvertida historia del movimiento pentecostal.
Aunque unos breves asuntos de la sociedad y unos
efusivos agradecimientos abrieron la reunión, el corazón
del evento se centró en una convincente presentación
del Dr. Daniel Tomberlin, profesor asociado del Seminario
Teológico Pentecostal y primer vicepresidente de la
sociedad. Su tema fue “El manejo de las serpientes en
la Iglesia de Dios”. (Ver discurso completo, [solamente en inglés.])

Un capítulo controvertido revisitado

El Dr. Tomberlin abrió su presentación aclarando su
motivación. “No se trataba de sensacionalismo”, dijo.
“Se trataba de hermenéutica”. Su investigación –ahora
disponible en su libro Serpientes en el altar– traza un
periodo de aproximadamente 20 años en el que la
manipulación de serpientes fue practicada por algunos
en la Iglesia de Dios e incluso apoyada por líderes clave.
Hizo hincapié en que el enfoque de su estudio se limitaba
a los años anteriores a 1923, cuando una alteración
provocó un importante cisma en el movimiento.

La práctica estaba arraigada en una interpretación
literal de Marcos 16:17, 18, donde Jesús dice que las
señales seguirán a los que crean: “Tomarán serpientes;
y si bebieren cosa mortífera, no les hará daño“. Para los
primeros pentecostales que buscaban un “evangelio
completo”, esto fue entendido por algunos como un
mandato de obediencia radical. El poder de Dios, creían,
les protegería de cualquier daño.

A.J. Tomlinson y el auge de la práctica

De especial interés para los lectores del Mensajero
Ala Blanca
es el papel de A.J. Tomlinson, el primer
supervisor general de la Iglesia. Aunque la mayoría
de los relatos históricos coinciden en que el propio
Tomlinson nunca manipuló serpientes, el Dr. Tomberlin
presentó documentación según la cual Tomlinson afirmó
públicamente la práctica. En 1914, Tomlinson escribió sobre “serpientes y fuego ardiente manipulados sin
daño para los santos”, señalando estas demostraciones
como uno de los fenómenos espirituales del avivamiento
pentecostal.

Tomlinson dio la bienvenida a George Hensley, a quien
a menudo se atribuye la introducción de la manipulación
de serpientes en el movimiento, como evangelista
autorizado y ofreció informes entusiastas de los
avivamientos de Hensley. Estos incluían incidentes en
los que se traían serpientes venenosas a las reuniones
y se manipulaban durante el culto. Los informes de
Tomlinson describían multitudes presenciando estos
actos, con algunos participantes mordidos y otros
declarando una protección milagrosa. En opinión de
Tomlinson, se trataba de señales que validaban el poder
de Dios.

Sin embargo, Tomberlin destacó un detalle importante.
Aun defendiendo la práctica como bíblica, Tomlinson
advirtió contra “los extremos y las empresas
presuntuosas”, instando al discernimiento y dando
prioridad al amor, la sabiduría y la unidad como mayores
señales de la obra de Dios.

Teología, trauma y puntos de inflexión

La presentación dio un giro reflexivo cuando el Dr.
Tomberlin reflexionó sobre los efectos a largo plazo de
la práctica. “Aunque podemos hablar de su fe”, dijo, “el
hecho es que estas acciones traumatizaron a la iglesia”.
Los pastores que sirven en comunidades con legados
de manipulación de serpientes aún se enfrentan a un
estigma y una confusión persistentes. Señaló que,
incluso un siglo después, persiste la incomodidad
con el tema, lo que se evidencia en la necesidad de
autopublicar su libro.

A medida que aumentaban los informes sobre lesiones,
muertes y división, voces tanto dentro como fuera de la
Iglesia de Dios empezaron a alzar la voz. En particular, el
artículo de T.E. Clark de 1934 en el Evangelio de la Iglesia
de Dios
ofreció una nueva lente interpretativa, sugiriendo
que el “tomar” serpientes podía leerse metafóricamente,
representando el triunfo sobre el mal, en lugar de actos
literales de manipulación de serpientes. Esto marcó un
cambio formal en la enseñanza de la Iglesia y señaló el
fin del apoyo institucional del movimiento.

También hubo oposición por parte de líderes de otras
denominaciones pentecostales. G.F. Taylor, de la Iglesia
de la Santidad Pentecostal, e I.E. Bell, de las Asambleas
de Dios, advirtieron que manipular serpientes era
semejante a tentar a Dios, comparándolo con el desafío
de Satanás a Jesús en el desierto. Argumentaron
que si bien la protección podía venir en encuentros
accidentales, buscar intencionadamente el peligro era
una lectura errónea de las Escrituras.

Hermenéutica y esperanza

El núcleo de la presentación de Tomberlin fue un
alegato a favor de la interpretación bíblica responsable.
Señaló el enfoque evolutivo de la hermenéutica del
propio A.J. Tomlinson. El de Tomlinson era uno que
integraba el intelecto, el Espíritu Santo y la experiencia
vivida. Tomlinson escribió que leer la Palabra sin el
Espíritu conduce a “servicios sin vida”, pero actuar sin
un discernimiento cuidadoso puede resultar en un
peligroso error.

Tomberlin concluyó que el movimiento de la
manipulación de serpientes reflejaba tanto el celo como
la vulnerabilidad de los primeros pentecostales. “El
creyente más devoto y fiel”, dijo, “puede convertirse en
un hereje ferviente” si el entusiasmo espiritual anula la
reflexión en la oración.

Por qué sigue siendo importante

¿Por qué volver a hablar sobre este capítulo incómodo?
Porque comprender nuestro pasado –su poder, sus
excesos y su recorrido teológico– ayuda a dar forma a un
futuro más maduro y guiado por el Espíritu. Mientras los
pentecostales de hoy seguimos buscando expresiones
auténticas del poder de Dios, también debemos buscar
sabiduría en la forma en que leemos, enseñamos y
aplicamos las Escrituras.

La manipulación de las serpientes ya no ocupa
un lugar en el culto de la Iglesia de Dios, pero las
conversaciones que suscitaron sobre la protección
divina, la interpretación bíblica y las marcas de la verdadera fe, aún resuenan en los círculos teológicos.
Como recordó el Dr. Tomberlin en la reunión, “Debemos
seguir interpretando las Escrituras no sólo literalmente,
sino espiritual y vivencialmente, permitiendo que el
Espíritu guíe nuestras mentes, nuestros corazones y
nuestras manos”.

La Sociedad Histórica de los Movimientos de
la Iglesia de Dios

Fundada en 2002, la Sociedad Histórica existe para
fomentar el estudio, la interpretación y la apreciación de
las historias compartidas y diversas de las hermandades
relacionadas con la Iglesia de Dios. La sociedad crea
un espacio en el que pastores, eruditos y miembros
pueden aprender unos de otros y explorar los orígenes
comunes a la vez que honran las distintas expresiones
de fe. Las reuniones anuales están abiertas a todo el
mundo y la membresía sólo cuesta 10 dólares al año.

Los líderes de la Sociedad incluyen representantes de
varios concilios de la Iglesia de Dios, con el Dr. Michael
Padgett de la Church of God Mountain Assembly como
presidente y los Dres. Daniel Tomberlin, Elías Rodríguez
y Shaun McKinley completando el equipo ejecutivo, en
representación de la Iglesia de Dios y la Iglesia de Dios
de la Profecía.

– Escrito por Bishop Shaun McKinley, PhD, director ejecutivo de Comunicaciones Mundiales, como fue publicado en la edición de julio del Mensajero Ala Blanca

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