Una Vida Devocional con Dios
En el caos de la vida, necesitamos un recordatorio de la bondad y el amor de Dios hacia nosotros. Con toda la oscuridad que nos rodea, necesitamos ayuda para recordar que Dios ha vencido al mundo y nos ha traído a la luz.
Fuiste creado para tener una relación real y tangible con Dios. Fuiste creado con anhelos que no pueden ser satisfechos hasta que experimentes la plenitud de Dios, la cual está disponible para ti a través de la vida, la muerte y la resurrección de Jesús. Creo firmemente que, si simplemente haces que tu corazón esté disponible para ser estimulado por la verdad de la cercanía y el amor de Dios, entonces experimentarás lo que sea que hayas estado buscando.
Si te comprometes a desarrollar una vida devocional y abres tu corazón para que Dios te ayude a florecer, el Espíritu Santo te guiará a tener un encuentro con tu omnipotente y omnipresente Creador. Dios desea ser encontrado. Anhela que conozcas su amor. Si comienzas cada día simplemente buscando reunirte con él durante quince minutos, tu corazón se hará cada vez más blando y se motivará a vivir completamente centrado en la bondad de Dios.
Evelyn Underhill escribe: “Esto es la adoración: no es un ejercicio religioso difícil, sino una actitud del alma”. Que todas nuestras vidas estén marcadas por una actitud de adoración. Que busquemos simplemente amar a Dios momento a momento y no solo en ráfagas infrecuentes. Y que experimentar la unión gloriosa con el Espíritu Santo, tal como nos lo permitió el sacrificio de Jesús, sea la base de todo lo que hacemos, pensamos y sentimos. Oro para que tu día de hoy esté marcado por la humilde y simple adoración al Rey de reyes y Señor de señores.
El encuentro con Dios conduce a la transformación de la vida. Las cosas triviales que antes parecían importar ya no importan. Aquello que te robó la alegría, el propósito y la vida abundante ya no te afectará. El amor de Dios es poderoso y real. Sus deseos son buenos y su presencia está disponible para ti. Tómate los próximos minutos para abrir tu corazón y comenzar a conocer el amor de Dios de una manera transformadora.
Provee lectura a estos versículos y permite que su palabra te aliente a vivir una vida devocional con Dios:
- Reflexiona sobre la profundidad del amor de Dios por ti. Permite que la Biblia estimule el deseo que tienes de Dios al pensar en su palabra.
“Sin embargo, en todo esto somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó. Pues estoy convencido de que ni la muerte ni la vida, ni los ángeles ni los demonios, ni lo presente ni lo por venir, ni los poderes, ni lo alto ni lo profundo, ni cosa alguna en toda la creación podrá apartarnos del amor que Dios nos ha manifestado en Cristo Jesús nuestro Señor”. Romanos 8:37-39
“Y nosotros hemos llegado a saber y creer que Dios nos ama. Dios es amor. El que permanece en amor, permanece en Dios, y Dios en él”. 1 Juan 4:16
“…para que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos, cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean llenos de la plenitud de Dios”. Efesios 3:17-19
- Pídele al Espíritu Santo que te revele su cercanía. Calma tu mente y abre tu corazón para recibir su presencia. Si tienes preguntas sobre la presencia de Dios, reflexiona sobre estos versículos.
“¿A dónde podría alejarme de tu Espíritu? ¿A dónde podría huir de tu presencia? Si subiera al cielo, allí estás tú; si tendiera mi lecho en el fondo del abismo, también estás allí. Si me elevara sobre las alas del alba, o me estableciera en los extremos del mar, aun allí tu mano me guiaría, ¡me sostendría tu mano derecha!”. Salmo 139:7-10
“Me has dado a conocer la senda de la vida; me llenarás de alegría en tu presencia, y de dicha eterna a tu derecha”. Salmo 16:11
- Tómate un tiempo para escribir cómo te sientes después de haberte encontrado con el amor de Dios. Anotar los efectos de encontrar a Dios despertará tu corazón hacia su realidad y te ayudará a buscarlo más seguido.