Es muy común que el ministerio de niños se enfoque y invierta la mayoría de sus esfuerzos en los niños, pero el ministerio de niños tiene la oportunidad de involucrar a las familias.
Los padres necesitan el apoyo de la iglesia mientras viven su papel de discipuladores en el hogar, y nosotros, como parte del ministerio para niños, podemos ayudarlos a prepararse para esta tarea. ¡Claro que si! Podemos ayudar a diseñar un ministerio para niños enfocado en la familia.
La pregunta que puede surgir es ¿Cómo puedo ayudar a la familia en esta tarea? Proveemos algunas formas de hacerlo:
- Hágalo fácil, claro y accesible para los padres: Es posible que los padres no tengan tiempo suficiente para leer un libro completo, inclusive puede ser que algunos padres no comprendan el evangelio. Es útil consolidar y brindar actividades sencillas para que los padres cultiven una experiencia familiar.
- Considere la edad de los niños: Asegúrese que el contenido para llevar a casa sea apropiado para la edad de los niños, ayudando a los padres a involucrarse en la vida espiritual de sus hijos.
- Instruya con la Palabra de Dios: Claro que se pueden enviar actividades familiares divertidas, pero asegúrese que mucho del tiempo en familia se invierta en la Palabra. Los hijos aprenderán a amar y aplicar la Palabra, mientras son enseñados en el hogar. Leer la Biblia con sus hijos es lo mejor que pueden hacer los padres. Provea un plan de lectura para la noche o un versículo de la Biblia que puedan memorizar durante la semana.
- Proporcione contenido complementario a la lección dominical: El ministerio de niños puede desarrollar su contenido o utilice recursos que usted considere conveniente según su contexto, población y necesidades. Asegúrese de enviarlos por los medios de comunicación que los padres y su ministerio utilice.
- Provea capacitación a los padres en el evangelio: Es importante que los padres puedan explicar el evangelio a sus hijos, quizás ellos estén listo para responder o regresar al evangelio. Puede hacer un video, boletín, también proveer capacitación. Es importante tomarse el tiempo de preparar a los padres para que usen los eventos diarios para guiar a sus hijos al evangelio.
Es razonable que será más fácil ayudar a diseñar un ministerio de niños enfocado en la familia con padres creyentes. Pero quizás en su comunidad ministra niños donde sus padres no lo son, es vital que su enfoque sea explicar el evangelio a los niños, guiando a los padres a esta verdad que puede cambiar sus corazones.
Al final del día, queremos apoyar a las familias para que comiencen el discipulado en casa, recuerde que el ministerio de niños únicamente puede apoyar a las familias a moverse al principio biblico. Con un ministerio de niños enfocado en la familia, podemos capacitar a los padres para que se involucren y se pongan en contacto con la Palabra junto a sus hijos.
Por: Abigahil Ávila